Usualmente, nos referimos a los impuestos solo como una obligación por parte de la ley. Pero, más allá del cumplimiento fiscal, debemos verlos como un componente fundamental de la gestión empresarial.
Si no los administramos de forma correcta, pueden impactar negativamente los flujos de efectivo y la rentabilidad final del negocio. De ahí la importancia de conocer los cuatro tipos de régimen tributario y acogerse al más conveniente.
Es difícil dar una respuesta especifica a esta pregunta. El régimen tributario de una empresa depende de su tamaño, ventas y actividad económica.
Conozcámoslos para ir entendiendo el asunto:
Este es el indicado cuando somos personas naturales, no emitimos facturas de ventas y manejamos pequeños negocios. Por ejemplo, tiendas de abarrotes, barberías, zapaterías o pastelerías.
Con este régimen no tenemos que enredarnos la vida con complejas liquidaciones de impuestos, estamos exentos de presentar declaración anual y no tenemos la obligación de llevar contabilidad. Lo único que debemos realizar es un pago de 20 o 50 soles, dependiendo de la categoría a la que nos acojamos:
Eso sí, para permanecer en este régimen tributario tenemos que desarrollar las actividades en un solo lugar y tener activos fijos inferiores 70,000.00 soles (exceptuando bienes raíces y vehículos).
En este régimen tributario sí aumentan las obligaciones impositivas, ya que debemos pagar dos tipos de impuestos mediante declaraciones mensuales:
Es al que debemos acogernos si somos personas con negocio o empresas que percibimos ingresos por actividades de comercio, industria o servicios, siempre que cumplamos estas condiciones:
La ventaja es que continuamos exentos de las declaraciones anuales y, respecto a la contabilidad exigida, basta con que llevemos el registro de compras y ventas.
Este es el régimen tributario para pymes. Fue diseñado pensando en facilitarles el cumplimiento tributario e impulsar su crecimiento. Por ello, ofrece ventajas envidiables para otras empresas, como la emisión de todos los tipos de comprobantes de pago y la posibilidad de llevar libros contables dependiendo de los ingresos anuales.
Exige las declaraciones mensuales con el pago del 18% del IGV y el 1% de renta mensual. Pero en la declaración anual tiene tasa preferencial en función de las ganancias netas del año:
Tramo de ganancia | Tasa del impuesto |
Hasta 15 UIT.
| 10% |
Más de 15 UIT.
| 29.5% |
El régimen tributario para pymes no establece montos de compras. Solo que los ingresos netos anuales inferiores a 1.700 UIT, así como una nómina de 10 trabajadores o menos.
Aquí ya hablamos de otras ligas. Está dirigido a las medianas y grandes empresas que producen rentas de tercera categoría, que son los ingresos producidos por diferentes tipos de actividades empresariales y comerciales. Sin importar el monto de ingresos o compras anuales.
La ventaja de que este sea el régimen tributario de una empresa es que, en caso de registrar pérdidas, es posible descontarlas de las utilidades de los años posteriores. Cruzamos cifras y rebajamos el monto del Impuesto a la Renta Anual.
Por lo demás, si nos acogemos a este régimen tributario asumimos varias obligaciones:
A grandes rasgos, estos son los cuatro tipos de régimen tributario, aunque el ejecutivo anunció en diciembre que ya está en marcha un proyecto que pretende reducirlos a dos no más.
Igual, es muy importante que los conozcamos con mayor profundidad para saber cuál es el mejor régimen tributario para los intereses de nuestro negocio, sin incurrir en incumplimiento fiscal. Y cualquiera que sea la elección, es fundamental que usemos un ERP para mantener toda la información en orden y optimizar la planificación tributaria.