El primer secreto para poder tener control de las debilidades de tu negocio es contar con una buena comunicación. Con esto nos referimos tanto a las relaciones que existen dentro de tu empresa como al conocimiento que tengas de lo que está ocurriendo cada día.
Dependiendo del área que te interese analizar o que consideres que debes preocuparte más, te recomendamos realizar una reunión de equipo, no sólo los jefes del área en cuestión, sino que también los trabajadores, siempre todos tienen algo que aportar y mientras tú conozcas el funcionamiento y lo que está ocurriendo podrás tomar las medidas correspondientes para mejorara el punto que te interese.
Una vez reunido el equipo debes generar un espacio de conversación donde todos se sientan cómodos y partícipes de ese momento. Deben lograr identificar cuáles son los puntos donde más tienen problemas, qué resultados son los más bajos, qué estrategias no están funcionando, cuáles son los planes que no han dado resultado. Identifiquen si hay algún patrón que se repita o que sea relativamente constante y trabajen en él, así estarán atacando directamente una debilidad.
Otra forma de reconocer las debilidades que hay en tu empresa es analizando los resultados y los datos que tengas de ella. Por ejemplo, en tu software puedes revisar cómo se está llevando a cabo la contabilidad de tu negocio y qué resultados se han conseguido, si notas alguna deficiencia o algo extraño es momento de poner ojo y ver qué es lo que está pasando. Recuerda que un buen software te permitirá anticipar cualquier situación de riesgo.
