El desarrollo tecnológico y la transformación digital de las empresas han impulsado la tendencia de usar soluciones avanzadas para ejecutar automáticamente tareas repetitivas que, de otra forma, deben ser atendidas por uno o varios trabajadores. Todo con el objetivo de incrementar resultados pues, tal y como lo señaló un informe de Forrester de 2018, las organizaciones que consigan dominar la automatización de procesos también dominarán sus industrias.
La respuesta a esta pregunta puede tomar páginas enteras, porque la automatización de procesos tiene una amplia gama de aplicaciones y, dependiendo de la naturaleza del negocio, los beneficios generados pueden variar. Sin embargo, las empresas suelen apoyarse en la automatización para:
En síntesis, las empresas que automatizan sus procesos pueden ser más productivas y rentables.
Una vez claro para qué sirve la automatización de procesos, debemos empezar a adaptarnos a esta tendencia, y una buena forma de hacerlo es implementando de un ERP.
El objetivo de sistema ERP funciones es ayudarnos, mediante la automatización de los procesos, a desarrollar más rápido y mejor las tareas de administración. Aunque dichas funcionalidades pueden variar de un programa a otro en función de su naturaleza y tamaño, entre las más comunes podemos citar:
Debemos aclarar que la mayor parte de la automatización de flujos de trabajo en estos procesos está asociada a la recolección y gestión de la información. Por ejemplo, si en el punto de venta vendemos determinado producto, este es descontado del stock en inventario una vez se genera la factura. Al mismo tiempo, el ERP realiza el respectivo registro en la contabilidad. Recordemos que los sistemas empresariales ERP nos ofrecen -en una misma plataforma- información en tiempo real de la gestión de los diferentes departamentos del negocio.
Por otra parte, también podemos automatizar la generación de reportes y presupuestos, y la distribución de tareas, así como realizar un seguimiento de los procesos.
En todo caso, el sistema ERP funciones evita que los colaboradores gasten su tiempo en la ejecución de tareas monótonas y tediosas que, aunque necesarias, pueden hacer que los colaboradores no puedan dedicarse a labores de mayor valor, como el análisis de determinados reportes o el estudio de nuevas oportunidades de negocio.